¿Te acordas cuando te sobrevaloré?

te cansaste de decir que no eras tan guau y yo seguía ladrando,
la culpa fue mía por creerme especial
(los grandes también copiamos las cosas malas de los demás)
no di oportunidad a conocerte, me convencí de que te conocía.

pensé en tu modestia grande como el sol
pero lo que quemaban eran grumos que salpican y hierven,
la mecha de mi admiración se prendió demasiado cerca
no fuí tan rápida y explotó en mi cara

quise que fueras todo lo que dije, 
me dediqué a comprar moscas en euros
me dediqué a cuidar mi imperio de alimentos vencidos.
No soy la visionaria de los negocios que pensé. 


Comentarios

Entradas populares